REFLEXIONES A LA UNIDAD 3 (II)

Hablemos de habilidades.

¿Es una habilidad el conocimiento? Evidentemente no, pero si su gestión. Si nos movemos en un espacio educativo, presencial o virtual, ha de ser fundamental un conocimiento lo más completo posible de aquello que queremos transmitir.

El problema es el cómo. Aunque algunos teníamos ciertas nociones y práctica sobre enseñanza online, en general hemos tenido que movilizar neuronas y musculatura digital par seguir el ritmo. Aunque ya se ha tratado en las netiquetas no quisiera dejar pasar la ocasión de recordar que hay que esmerarse, y repasar, en la escritura. No podemos ser Cervantes, pero tampoco darle a la tecla “sin ton ni son”.

Seguramente en estos textos meteré algún gazapo ortográfico o gramatical, pero es conveniente que las cosas se entiendan. Es lo mínimo exigible y, lamentablemente, en la red hay muchas excepciones.

Esto trasladado a la tutoría online es el fin. ¿Se imaginan a un tutor respondiendo a un alumno en una especie de Swahili? ¿Qué haría el alumno? La respuesta no se explicita por ser obvia. Podíamos discutir mucho sobre cómo comunicar y no terminaríamos nunca. Por no extenderme puedo decir que en estos días he visto que también es muy complicado el “cuándo”.

Estoy tratando de imaginarme lo que haremos nosotros un día de estos con nuestros alumnos. Muchas actividades en poco tiempo. No es que las cosas tengan que ser tan comprimidas, sino que ellos no tienen mucho tiempo. ¿Puede, por tanto, ser un habilidad comunicativa el control y distribución del tiempo?. Hay dejo la pregunta.

Por lo que veo, y no soy el único, hay alguna actividad que no hemos llegado a comprender.

Si fuera tan fácil todos los profesionales de la enseñanza seríamos unos fenómenos. Yo en estas cosas veo un problema de aprendizaje. Yo puedo leer un montón de libros sobre estos temas y quizá aprenda algo, pero no tengo claro que lo haya aprendido como para ponerlo en práctica.

Algo me falta y es donde creo que falla la formación online y donde tendría ventajas la presencial (opinión muy personal).

Me ha parecido que practicar el liderazgo ha sido lo más interesante por ser lo más real estas semanas, en el sentido de que cuando el alumno se pone de verdad en el papel del tutor puede desarrollar sus habilidades en este terreno. Aquí jugamos con ventaja ya que desarrollamos nuestro trabajo en un entorno que facilita el liderazgo en el aula (virtual o no).

Hay algo que me viene ahora a la mente. Todas las habilidades que tratamos como TOL ¿darían el mismo resultado si el alumno es voluntario en su curso o se lo ha impuesto la organización? Quiero pensar que habría que esmerarse aún más en las habilidades para no perder el cliente (no se irá, pero no estará muy motivado).

A riesgo de ser pesado quiero insistir en que es muy difícil adquirir y poner en práctica habilidades en la red. Por lo que estoy viendo, y tomo nota, cuando tengamos ocasión de ser TOL tendremos que andar con pies de plomo (¡que Dios nos pille confesados!).

Lo más enriquecedor, no todo va a ser negativo, ha sido tratar de desarrollar estas actividades con alumnos tan dispares (entre los que me incluyo) y hacerlo de manera asíncrona total (unos por la tarde, por la mañana…). Conclusión: Siendo honrados, me falta práctica. En mi descargo diré que nos falta tiempo y que además hacemos otras cosas a la vez (cuando seamos tutores ni os cuento).

De todas manera me lo paso como un enano. Lo que me “joroba” es abrir y cerrar tantas ventanas. Eso tenemos que mirarlo con detalle.

Un saludo.